Ante el aumento de casos de coronavirus en la región, el alcalde Steve Adler pidió que se le exigiera a los empleados gubernamentales obtener la vacuna contra el virus. Sin embargo, una orden del gobernador de Texas lo prohíbe.
La orden ejecutiva firmada por el gobernador Greg Abbott manda además al Departamento de Seguridad Pública detener a cualquier vehículo sospechoso de transportar inmigrantes. De acuerdo con Edgar Saldívar, abogado de la ACLU, esta acción, catalogada como racista, es un intento del mandatario de promover sus posibilidades electorales.
El gobernador Greg Abbott ordenó al Departamento de Seguridad Pública de Texas a detener cualquier vehículo bajo sospecha razonable de transportar a personas que han cruzado la frontera ilegalmente.
El fin de los "avisos", dijeron, es el bienestar de la comunidad y estar alineados con los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), que este pasado 27 de julio hizo un revés a su propia política y recomendaron a la población de personas vacunadas que utilice una cubierta facial en lugares cerrados.
El alcalde de la capital texana exhortó a los padres que compartieran sus preocupaciones sobre el regreso a clases y el aumento de casos de coronavirus con sus distritos escolares.
El alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg, usó las redes sociales para instar a los residentes a que presten atención al fuerte aumento de casos y hospitalizaciones locales por covid-19. San Antonio, que actualmente tiene una tasa de positividad del 17 por ciento en los casos por coronavirus, califica como un área de alta transmisión según la guía de los CDC.
Un grupo de maestros le pidió al mandatario que permitiera a los distritos escolares requerir el uso de mascarillas ante el aumento de casos de coronavirus en el estado. A través de las redes sociales, Greg Abbott respondió que no lo hará.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, anunció que había ordenado a los miembros de la Guardia Nacional texana para que comiencen a ayudar a realizar arrestos a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.
El gobernador anunció que las personas que cometan allanamiento u otros delitos estatales estarán sujetas a arresto y confinamiento. Esta orden se basa en la declaración de desastre de Abbott que ordena al DPS hacer cumplir todas las leyes penales federales y estatales, incluso para la entrada al estado de forma irregular, el contrabando y la trata de personas.
Austin Public Health informó que la tercera ola de casos de coronavirus en la región está agotando la capacidad del hospital, por lo que se instó a la comunidad a usar mascarillas, incluyendo a las personas vacunadas.
La Asociación de Maestros del Estado de Texas publicó una carta en la que piden al mandatario que le permita a los distritos escolar exigir el uso de cubrebocas en los planteles ante el aumento de casos de coronavirus en la región.
Las normas exactas de esta decisión serán dadas oficialmente a conocer el próximo viernes. Las autoridades indicaron que los estudiantes de kindergarten a sexto grado tendrán la opción de tomar clases de manera remota.
Con el inicio de clases en solo unas pocas semanas, la petición dice que los legisladores han recibido varias llamadas de padres preocupados por la variante delta y el aumento de casos de coronavirus en la región.
Bajo la etapa 4 de riesgo por coronavirus, se pide a todas las personas, incluyendo las vacunadas, utilizar mascarillas para así evitar la propagación del virus.
El director interino de ERCOT, Brad Jones, indicó que esperan tener "una cantidad suficiente de generación para servir a todos los texanos”, luego de que millones se quedaran sin electricidad durante el clima extremo por la tormenta invernal en febrero.
El Departamento de Justicia Criminal de Texas dijo el miércoles que el condado de Val Verde, hogar de Del Rio, arrestó y llevó a tres personas a la Unidad Briscoe en Dilley bajo la iniciativa fronteriza de Abbott, una pequeña ciudad entre San Antonio y Laredo.
El gobernador texano, quien ha criticado con dureza las medidas migratorias de Biden, ha promovido que se arresten a inmigrantes por faltas menores, como el allanamiento de morada, puesto que los delitos migratorios corresponden al gobierno federal.
"El fentanilo es una de las drogas más letales en las calles, es 100 veces más potente que la morfina y unas 50 veces más que la heroína", precisó el gobernador de Texas, Greg Abbott, en las instalaciones de Crime Stoppers en Houston, donde convirtió en ley la propuesta SB 768. Con la nueva legislación, el castigo por fabricar o traficar de cuatro a 200 gramos de este opioide sintético es de una pena de 10 años en prisión a cadena perpetua.
El gobernador Greg Abbott dijo este miércoles que a pesar del aumento en los casos de coronavirus en Texas, no impondrá otra orden de usar mascarillas en el estado.