Las hierbas aromáticas son muchas veces las responsables de ese sabor particular que tiene cada comida. Hoy por hoy, el mercado nos ofrece diversas formas de conseguirlas: secas, frescas, embasadas y combinadas, entre otras. Pero el sabor que cada una de estas formas nos ofrece, no se puede comparar con el de la hierba recién cosechada.