La bebé nació en la casa y la madre llamó al 911 para reportar que no respondía; la condenan por la muerte de su hija
TUCSON, Arizona. - Una corte de Tucson sentenció este viernes 6 de enero a Michelle Wimberly, la madre de una bebé recien nacida a 13 años de prisión por la muerte de su hija.
El caso inició en el 30 de diciembre de 2019, cuando el Departamento de Seguridad Infantil recibió un informe sobre Charlotte Richardson, quien nació en la casa y murió poco después. La madre, Wimberly, de 43 años, admitió haber usado "oxys" mientras estaba embarazada de su hija.
La madre había marcado al 911 para pedir ayuda cuando la bebé no respondía y dijo que había dado a luz una hora antes. Los detectives de homicidios del sheriff del condado de Pima encontraron inconsistencias en las horas de nacimiento de la bebé.
El médico forense del condado de Pima determinó más tarde que la causa de la muerte se atribuyó a los efectos tóxicos combinados de la metanfetamina y la morfina. El Departamento tomó la custodia del hermano del bebé y presentó una petición de dependencia ante la Corte de Menores del condado de Pima el 3 de enero de 2020. El 30 de marzo de 2020, e l tribunal determinó que la negligencia de Wimberly resultó en la muerte de Charlotte.
Tres años después los detectives de homicidios del alguacil del condado de Pima concluyeron el caso.
Wimberly se declaró culpable de dos cargos de abuso infantil.