Ronald Salazar fue condenado a 2 cadenas perpetuas por el asesinato de su hermana Estefani. Poco después de la tragedia, los padres de Ronald Salazar se separaron. El padre cayó en una depresión profunda. En 2012 la Corte Suprema decidió que menores sentenciados a cadena perpetua deberían volver a corte y eso le dio a Ronald una nueva oportunidad.