‘Spics’, la ofensa racista que recibió una adolescente hispana en San Francisco

LOS ÁNGELES, California. Martha Vásquez, una nicaragüense que vive en San Francisco, California, afirma que su hija Rosa, de 16 años, aún trata de recuperarel ánimo luego de haber vivido un incidente de odio en el que, asegura, le amenazaron de muerte y le enviaron mensajes de texto racistas.
Vásquez decidió guardar esos mensajes. En uno de ellos se lee: “ Spics (un término altamente ofensivo que hace referencia a un hispano) que roban 50,000 dólares en joyas son deportados. Go Trump”.
La amenaza fue enviada al celular de Rosa, cuenta, por la madre de uno de sus amigos. La mujer le habría exigido que le devolviera un anillo hurtado de su casa, pero la menor aseguró que no lo tenía.
“Pensé que esta señora estaba loca, pero al mismo tiempo nos pusimos nerviosos, nos entró miedo”, contó Vásquez a Univision Noticias.
Esta madre centroamericana relató que la pesadilla de su hija comenzó a principios de marzo, cuando asistió a una fiesta en casa de un amigo. Era una reunión de jóvenes y, ante la ausencia de adultos, consumieron alcohol y drogas, según le contó la menor.
Pero una semana después de la fiesta, Rosa recibió una llamada telefónica mientras se encontraba en la escuela. Era la madre de su amigo que la acusaba de haber tomado un anillo de alto valor.
“Ahí fue donde le dijo a mi hija que si no le regresaba su anillo ella iba a matarla con su pistola. Ella estaba con miedo, empezó a llorar”, recuerda Vásquez.
Posteriormente, la mujer le envió mensajes de texto en los que la amenazó con que la reportaría a ella y a sus familiares a las autoridades migratorias para que los deportaran. “Dile a tus padres que den la cara. La policía irá a tu casa pues hay testigos”, se lee en otros escritos.
El acoso de la mujer, aseguró Vásquez, continuó hasta que decidieron reportarla a la Policía de San Francisco, que investiga el caso.
“Quedamos con miedo porque si alguien dice cosas racistas eso va más allá”, dice Vásquez, de 43 años y quien se gana la vida limpiando oficinas.
Esta nicaragüense, sus tres hijas y su esposo viven legalmente en Estados Unidos, por eso no les preocupó la advertencia sobre la deportación. Les inquietaba más la posibilidad de ser víctimas de una agresión. “Mi peor miedo era que esa señora fuera a la escuela de mi hija a matarla o que viniera a quebrarnos los vidrios”, señaló.
Su hija, afirmó, se deprimió por las amenazas y faltó a la escuela unos días.
El hostigamiento cesó cuando la policía se comunicó directamente con la mujer para pedirle que dejara de llamar a la joven. Las autoridades no han determinado si se cometió algún delito. A la fecha solo pidieron a los presuntos afectados que denuncien si reciben nuevos mensajes.
Vásquez, quien llegó legalmente a EEUU en 2007, cree que este incidente, que ella considera “un crimen de odio”, ha sido propiciado por el actual ambiente político.
“A raíz de que el señor (Donald) Trump empezó a acusar a los mexicanos de ladrones y todo eso, como que se vino una ola de racistas que estaban escondidos; empezaron a despertar, no les importa atacarte, ya no tienen miedo”, menciona la centroamericana.
Ella aseguró que no había sufrido ningún ataque “racista” en los 10 años que ha vivido en San Francisco y espera que éste sea el último.
“Nosotros somos gente trabajadora, honrada; mis hijas van a la escuela y trabajan, están luchando para ser alguien en la vida. Vinimos para salir adelante”.