Oficiales acudieron a una vivienda en California en septiembre del 2022 para auxiliar a un pequeño de 7 semanas, quien se encontraba inconsciente. El bebé estuvo conectado a un respirador artificial por más de cuatro meses, pero falleció. El médico forense determinó que la muerte se trató de un homicidio y su padre fue acusado. Según el fiscal, el sujeto le ocasionó fracturas en la clavícula, costillas y cuello al bebé; además, también le causó hemorragias en los ojos.
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