Cuando piensas en el día de San Valentín, imaginas sentarte con tu amorcito frente al calor de Netflix, para ver series tiernas como You... No, esa no. Como Black Mirror... Bueno, tampoco (hablando de series que te harán agradecer estar soltero). Tal vez las amenazas del futuro tecnológico y la obsesión no son lo primero que relacionas con el 14 de febrero, pero eso no detuvo a Katy Perry de mezclarlos.