El Servicio para el Control de Inmigración y Aduanas (ICE) solo cuenta con 7,500 agentes en su unidad de deportaciones, los cuales tendrán una misión imposible encomendada por Trump: expulsar a 11 millones de indocumentados. Pero hasta ahora, no es Trump el que más migrantes ha devuelto a su país en las últimas dos décadas. Aún no se conocen las prioridades de deportación del segundo mandato de Trump.