Un hombre mató a su esposa embarazada y la enterró en su jardín: los restos fueron hallados 20 años después
Los restos de una mujer asesinada hace 20 años por su marido fueron encontrados enterrados en el jardín de la casa al que el hombre se mudó tiempo después de haber cometido el homicidio.
De acuerdo con las autoridades, el homicidio sucedió luego de que ella descubrió que su esposo tenía una aventura con una menor de edad.
En 2001, cuando se cerró la investigación policial sobre la desaparición de Debbie Griggs, de 34 años y embarazada de su cuarto hijo, su esposo Andrew Griggs se mudó a una propiedad de St. Leonards, en Dorset Reino Unido, contó Daily Mail.
En Dorset, Griggs vivió con sus tres hijos, se casó por segunda vez e incluso inició un negocio de maquetas de barcos.
Aunque durante casi dós décadas, Griggs, un marinero de 59 años, se declaró inocente de la desaparición de su esposa, a la que siempre tildó como una mujer depresiva que alguna vez había dicho querer suicidarse, una revisión realizada detectives de la Dirección de Delitos Graves de Kent y Essex logró que aquel hombre fuera condenado a cadena perpetua en 2019.
Durante ese juicio, los fiscales precisaron que Griggs era la persona con más razones para desear la muerte de su esposa, quien había descubierto su romance con una adolescente de 15 años y porque podía quedarse con el negocio a nombre de ella.
En el tribunal, la inspectora jefe de la Dirección de Delitos Graves de Kent y Essex, Kaye Braybrook, le pidió a Griggs que revelara dónde había escondido el cuerpo de “una madre cariñosa de tres hijos” que había sido asesinada “por un individuo insensible y manipulador que ha hecho todo lo posible para destruir la reputación de su esposa”.
Braybook se dirigió a Griggs y le pidió tener “la valentía de hablar y permitir que quienes siguen llorando su pérdida tengan alguna forma de cierre. No es demasiado tarde para que haga lo correcto".
Antes de sentenciarlo, el juez Robin Spencer lamentó que Griggs, en más de 20 años, nunca hubiera dicho dónde estaba el cuerpo de quien fuera su pareja y que durante todos esos años no haya confesado el homicidio.
"Su cuerpo nunca ha sido encontrado, sólo usted sabe cómo la mató y dónde se deshizo de su cuerpo (…) pero al asesinarla también destruyó la vida de su hijo por nacer”, precisó Spencer, quien añadió que sospechaba “fuertemente” que el hombre había arrojado el cadáver al mar.
Un cierre deseado
Tres años después de que el hombre fuera sentenciado -con un periodo mínimo de 20 años- los restos de Debbie fueron desenterrados del jardín de aquella propiedad, gracias a una aviso que llegó a las autoridades hace un par de semanas
La excavación de las autoridades pudo descubrir diversos restos, incluidos fragmentos de dientes, a los que se les realizó un examen especializado que pudo confirmar el pasado 14 de octubre que pertenecían a la víctima, informó en un comunicado la Policía de Kent.
“Nunca habíamos perdido la esperanza de encontrar algún día sus restos y dar a sus seres queridos un cierre (…) espero que puedan consolarse sabiendo que ahora Debbie puede descansar en paz”, dijo el inspector jefe Neil Kimber.
La policía ha dejado claro que continuarán con una investigación para determinar los pormenores del asesinato de la mujer y cómo llegó a ser enterrada en el jardín de la vivienda.