Una niña casi se asfixia comiendo nuggets de pollo de un McDonald's: dentro había pedazos de una mascarilla
Laura Arber y su hija de seis años, Maddie, compraron nuggets de pollo en un McDonald's de la localidad de Aldershot, en Reino Unido.
La mujer había salido con tres de sus hijos al local a recoger un pedido que habían hecho y regresaron a comerlo en casa, sentados en el sofá.
De pronto, la madre se dio cuenta de que la niña tenía dificultades para tragar los nuggets y se estaba empezando a asfixiar. Inmediantamente, sin pensarlo dos veces, Arber le metió los dedos en la boca a la niña, intentando extraer el pedazo de nugget atascado. Por suerte, lo consiguió, y para su sopresa, descubrió lo que claramente era un pedazo de mascarilla quirúrgica azul.
"Ni siquiera pensé que eso podría venir de un nugget de pollo, pero miré dentro de la caja y lo primero que vi fue esa cosa azul saliendo de otro nugget en una caja de 20", detalló la madre al diario Daily Mail.
"La mascarilla estaba cocinada ahí dentro, como una parte de la masa, pero es claramente una mascarilla. Se puede ver la costura y se nota la parte más dura", añadió.
Tras comunicarse con la sucursal de McDonald's visitada, la madre volvió al establecimiento para hablar con el gerente, quien le explicó que los nuggets no los cocicinaban allí y ni siquiera le pidió disculpas.
"Lo peor es que siguieron sirviendo esos nuggets. Antes de irme le pregunté: ¿Va a continuar sirviéndolos? Y continuaron, y eso fue lo peor para mí. No podía creerme cómo la administración del lugar gestionó el asunto", declaró Arber.
"¿Qué hubiera pasado si yo no estuviera en la habitación y mi hija se hubiera atragantado? Podría haberse muerto. Es algo que ocurre en fracción de segundos", añadió. "Además, solo pienso que estamos en una pandemia y que hay una mascarilla en el nugget de mi hija".
La mujer dijo que siempre había tenido a la compañía en alta estima, por el apoyo que recibió de ellos en un momento muy importante de su vida. Cuando nació su hijo tuvo que ser ingresado en cuidados intensivos y ella pudo quedarse en un alojamiento proporcionado por Ronald McDonald House Charities, para familias cuyos hijos están muy enfermos en el hospital. Pero la experiencia de la mascarilla, dijo, la había decepcionado.
"Sentimos mucho conocer la experiencia de este cliente", escribió un portavoz de McDonald's, citado por el Daily Mail. 'La seguridad alimentaria es de suma importancia para nosotros y ponemos gran énfasis en el control de calidad, siguiendo estándares rigurosos para evitar imperfecciones".
"Cuando el asunto se informó a nuestro personal, nos disculpamos, ofrecimos un reembolso completo y le pedimos al cliente que devolviera el artículo para que pudiéramos investigar más el asunto y aislar el producto afectado", añadió.
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