El pasado 21 de febrero, mientras se jugaban los últimos segundos de un partido de baloncesto femenino, una de las entrenadoras se desplomó y quedó inconsciente en el suelo. Inmediatamente, el oficial de recursos escolares y asistentes del público auxiliaron a la mujer, pero al notar que no tenía pulso le practicaron reanimación cardiopulmonar al tiempo que un alumno buscaba un desfibrilador. Tras varios choques eléctricos, la entrenadora recuperó el conocimiento y fue trasladada al hospital.