Estos son los casos confirmados desde el 26 de febrero hasta el 27 de marzo en Latinoamérica, y las medidas adoptadas por algunos países para contener el virus.
La presidenta interina de Bolivia anunció su candidatura a las elecciones de mayo, algo que generó críticas incluso en el seno de su gobierno. Este domingo, Añez pidió la renuncia de todos sus ministros para encarar una "nueva etapa".
La presidenta interina Jeanine Añez aprobó un decreto que prohíbe el uso de la imagen de altas autoridades en entidades y obras estatales. Mientras, su gobierno retira (en ocasiones a golpe de martillo) los símbolos que dejó Evo Morales en sus casi 14 años de poder y se plantea qué hacer con un museo dedicado a su figura que costó 7 millones de dólares y que, entre otras cosas, tiene una camiseta de Cristiano Ronaldo.
La presidenta provisional de Bolivia, Jeanine Áñez, y la presidenta del Senado, Eva Copa, han sido las protagonistas centrales de que el país se encamine hacia nuevas elecciones después de que el expresidente Morales renunciara.
La Iglesia Católica, Naciones Unidas y la Unión Europea promueven las conversaciones entre el Movimiento al Socialismo (MAS), del renunciante presidente Evo Morales, y el Gobierno de transición liderado por Jeanine Áñez para definir una convocatoria a las elecciones y la selección de quienes deben ser los jueces electorales que dirigirán ese proceso.
Esta abogada de 52 años fue hasta este martes una cara poco conocida fuera de Bolivia. Se declaró presidenta con el objetivo de "pacificar" al país tras la renuncia de Evo Morales, pero la forma en la que asumió el cargo, en una sesión legislativa que no contó con el quórum requerido, podría avivar las tensiones en el país.
Las horas previas a la renuncia fueron de alta tensión y comenzaron en la madrugada cuando el secretario general de la Organización de Estados Americanos tuiteó el informe preliminar sobre la auditoría realizada a los comicios del pasado 20 de octubre, que investigó con un equipo las denuncias de irregularidades en el cómputo de la votación general.
Tras cuatro días de un escrutinio celebrado en medio de protestas por sospechas de fraude, el tribunal electoral declaró ganador a Evo Morales, que evita ir a una segunda vuelta por medio punto. Sin embargo, estar al frente del país por cuarto periodo consecutivo no le será fácil al líder indígena pues tendrá frente a sí un país dividido y podría enfrentar problemas de gobernabilidad.
La paralización del conteo rápido de los votos, con el 83% del escrutinio marcando una segunda vuelta electoral entre Morales y el exmandatario Carlos Mesa, ha levantado sospechas en la oposición boliviana por el temor a una manipulación de los resultados. Pese a que el presidente confía en el voto rural para evitar el balotaje, estos fueron los peores resultados para su partido en casi 14 años.
Con más del 83% de los votos escrutados, Morales tiene un 45% y Carlos Mesa, un 38%. Por la noche el Tribunal Electoral detuvo el conteo de votos. De confirmarse los resultados preliminares, sería la primera vez que Bolivia va a una segunda vuelta electoral y que el presidente no es revalidado por mayoría desde que está al frente del país hace 14 años.
Los bolivianos acuden a las urnas este domingo para elegir al próximo presidente de Bolivia en unos comicios donde Evo Morales se enfrenta a una cuestionada reelección. De salir victorioso, el mandatario podría estar poder por 19 años consecutivos, hasta 2025.
Si hay una ciudad en Bolivia que se ha beneficiado de la prosperidad económica que ha acompañado al gobierno de Evo Morales es El Alto, donde la creciente burguesía aymara ha reflejado su auge con unos llamativos edificios de colores. Pero ante las elecciones del domingo, en la que el presidente busca revalidar un controvertido cuarto mandato consecutivo, los economistas advierten de amenazas que se ciernen sobre el país si no se hacen ajustes.
Pese a que la atención internacional de los incendios en la Amazonía se ha centrado en Brasil, en Bolivia el fuego ha consumido 1.2 millones de hectáreas, devastando a su paso bosques, pastizales y fauna. Mientras el gobierno de Evo Morales se abrió a la cooperación internacional, la sociedad civil trata de organizarse para canalizar la ayuda.
La familia de Jhesica Nina, una joven de 20 años apuñalada hasta la muerte supuestamente por su expareja, pide justicia y que el caso sea tratado como un feminicidio. Pero en Bolivia, el país con más altos índices de este delito en Sudamérica, muchos de estos crímenes quedan en la impunidad como advierten ONGs locales y organismos internacionales.
Pese a que la población de Bolivia rechazó una nueva reelección de Evo Morales en un referendo, el Tribunal Electoral dio luz verde para que el presidente, que ya lleva 12 años en el poder, pueda presentarse nuevamente en los comicios de 2019. Se trata de una nueva victoria en su camino para aferrarse al poder al margen de la Constitución Política que él mismo promulgó en 2009 y que permite un máximo de dos períodos presidenciales continuos.