El programa busca otorgar facilidad a los habitantes de Nueva York, en un momento en que la variante Delta ya representa el 25% de los casos de coronavirus en el país, tal como lo han indicado los CDC. Según las autoridades sanitarias, las personas que reciben la inoculación en sus domicilios pueden escoger la vacuna de su preferencia, pero si requieren una segunda dosis, deberán asistir a una farmacia.
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