Para muchos, el llamado sueño americano incluye llegar a ser propietarios de una vivienda, ya sea una casa o un apartamento. Pero los inmigrantes enfrentan serios desafíos para llegar a tener su hogar propio. Una meta difícil de alcanzar, pero no imposible, gracias al programa Homefirst, que está ayudando a ser realidad este ideal.