Aunque ya era un hecho que la Reserva Federal subiría las tasas de interés, a muchos sorprendió el anuncio de que varios de los bancos más grandes elevarían sus intereses de 3.50 a 3.75%. La jefa de este organismo dice que no considera necesario el estímulo económico propuesto por el presidente electo Donald Trump, el cual incluye reducir los impuestos.