El caso de Martha Sepúlveda, la colombiana que recibiría el pasado domingo la eutanasia sin tener una enfermedad terminal, continúa generando opiniones encontradas luego de que autoridades de salud cancelaran su petición para morir dignamente. Familiares de la mujer, quien sufre esclerosis lateral amiotrófica, piden que se respeten sus derechos y no se justifique la negación con creencias religiosas.