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Derechos de la Mujer

Google honra al inmigrante griego inventor de la citología, un examen que le ha salvado la vida a miles de mujeres

Georgios Papanicolaou ideó la prueba del "Pap" para detectar el cáncer cervical que se le recomienda a las mujeres a partir de los 21 años. Llegó a Estados Unidos sin hablar inglés cuando tenía 30 y aunque era un médico e investigador prodigio, su descubrimiento fue recibido con escepticismo. Con un Doodle, este lunes se conmemora el que hubiese sido su cumpleaños número 136.
13 May 2019 – 05:05 PM EDT
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El Doodle que conmemora el cumpleaños número 136 del científico e investigador griego Georgios Papanicolaou. Crédito: Captura de pantalla vía Google

El médico que inventó el examen que le ha salvado la vida a miles de mujeres era un inmigrante griego que hablaba poco inglés. Georgios Papanicolaou es el inventor de la citología para detectar el cáncer cervical, conocido en inglés como Pap smear.

Este tipo de cáncer de cuello uterino era una de las causas principales de muerte de las mujeres en Estados Unidos a principios del siglo XX: cobraba casi 40,000 vidas al año, según la Sociedad Americana del Cáncer (ACS por sus siglas en inglés). La organización recomienda que las mujeres se comiencen a hacer el examen a los 21 años y cada pocos años a partir de entonces.

En EEUU, las hispanas son las que tienen más probabilidades de contraer cáncer cervical, seguidas por las mujeres negras. La ACS estima que este año se diagnosticarán cerca de 13,200 casos nuevos de cáncer cervical y que aproximadamente 4,250 mujeres morirán de esta enfermedad.

La tasa de mortalidad por el cáncer cervical se redujo un 70% con el aumento del uso de la prueba de Papanicolaou. Este procedimiento puede detectar cambios en el cuello uterino antes de que se desarrolle el cáncer o en sus etapas tempranas, cuando es pequeño y más fácil de curar.


Esto se lo debemos a Papanicolaou, quien como muchos inmigrantes tuvo que batallar sus primeros años en el país y al principio recibió mucho escepticismo por su descubrimiento.

Al llegar a EEUU a los 30 años y sin hablar inglés, Papanicolaou tuvo que trabajar como vendedor de tapetes, violinista en un restaurante y vendedor en un periódico griego, según relata la página web del hospital New York Presbyterian. Un año más tarde, en 1914, consiguió un trabajo de medio tiempo investigando en el departamento de patología del antiguo Hospital de Nueva York y pronto lo transladaron a un puesto de investigación de tiempo completo en la Facultad de Medicina de la Universidad de Cornell.

Allí comenzó sus estudios sobre el cáncer de cuello uterino y experimentó en conejillos de indias. Como no tenía una licencia para practicar medicina en EEUU no pudo acceder a otros sujetos de prueba humanos, entonces experimentó en su esposa Andromahi Mavrogeni, con quien emigró desde Grecia.

En 1928, el investigador presentó sus hallazgos, pero tuvo que pasar una década para que se aceptaran y fueran avalados por la comunidad científica.

"Como era griego y no aprendió a hablar inglés muy bien, mucho de lo que presentó aparentemente tenía errores de ortografía", dijo en entrevista Rema Rao, doctora y asistente del laboratorio de citopatología de Papanicolaou en el New York-Presbyterian Hospital y profesora asistente de patología y medicina de laboratorio en Weill Cornell Medicine. "Luchó mucho por comunicar a la comunidad médica lo que estaba tratando de decir".


Papanicolaou trabajó en lo que hoy es el Centro Médico New York-Presbyterian Weill Cornell durante los próximos 47 años.

Finalmente, las contribuciones de Papanicolaou fueron reconocidas en todo el mundo. Fue nominado varias veces para un Premio Nobel y su imagen salió en estampillas en EEUU.

En sus últimos años estableció su propio centro de investigación de cáncer en Miami, donde murió a los 78 años, poco antes de que se inaugurara el centro, en 1962.

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