null: nullpx
Univision Noticias
Política
    Departamento de Defensa (Pentágono)

    El plan del Pentágono en su 'guerra' contra el cambio climático

    El Departamento de Defensa usa el 80% de los recursos energéticos que consume el gobierno federal estadounidense, mucho más que varios países del mundo. El presidente Biden pidió un nuevo plan de acción que responda a la idea de que el cambio climático es una amenaza para la seguridad nacional.
    9 Oct 2021 – 02:25 PM EDT
    Comparte
    Cargando Video...

    El nuevo plan del Pentágono exige que todas las fuerzas armadas de Estados Unidos incorporen las realidades de un planeta más caliente y hostil, desde incluir el deterioro de las condiciones climáticas extremas en la planeación estratégica hasta el entrenamiento de los soldados sobre cómo asegurar sus propios suministros de agua y tratar las heridas por calor.

    El Pentágono —cuyos aviones, portaaviones, transportes terrestres, bases y edificios de oficinas consumen en conjunto más petróleo que la mayoría de los países— fue uno de los organismos federales a los que el presidente Joe Biden ordenó reformar sus planes de adaptación climática una vez que asumió el cargo en enero.

    “Estos son pasos esenciales, no sólo para cumplir un requisito, sino para defender a la nación en cualquier condición”, escribió el secretario de Defensa, Lloyd Austin, en una carta que acompaña al plan climático del Pentágono, una de la veintena de dependencias que dieron a conocer esos planes el jueves.

    Es la continuación de décadas de evaluaciones militares en las que se afirma que el cambio climático es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, dado el aumento de los riesgos de conflicto por el agua y otros recursos más escasos, las amenazas a las instalaciones militares y cadenas de suministro del país y los riesgos añadidos para las tropas.

    El plan de adaptación al cambio climático se centra la necesidad de incorporar datos y consideraciones climáticas precisas y actuales en la toma de decisiones estratégicas, operativas y tácticas. Eso incluye la capacitación continua de altos funcionarios y otros en lo que el informe llama alfabetización climática.

    “La falta de integración adecuada de una comprensión del cambio climático en los riesgos relacionados puede aumentar significativamente los costos operativos y de adaptación del Departamento con el tiempo, ... poner en peligro la cadena de suministro y/o resultar en capacidades del Departamento degradadas y obsoletas”, advierte el plan.

    Un departamento voraz

    Las fuerzas armadas estadounidenses son el mayor consumidor institucional de petróleo del mundo y, por tanto, un responsable clave del deterioro del clima a nivel mundial.

    Pero el plan del Pentágono se centra en la adaptación al cambio climático, no en reducir su enorme producción de contaminación por combustibles fósiles que destruye el clima.

    El plan esboza en términos comerciales el tipo de riesgos a los que se enfrentan las fuerzas estadounidenses en el sombrío mundo que les espera:


    • Colapso de los caminos ante el paso de los convoyes al derretirse el permafrost —la capa de suelo congelado de regiones muy frías.
    • Falla de equipos cruciales por el calor o el frío extremos.
    • Desempeño de tropas estadounidenses en regiones áridas extranjeras que compiten con las poblaciones locales por las escasas reservas de agua, creando “fricciones o incluso conflictos”.

    El empeoramiento de los incendios forestales en el oeste de Estados Unidos, huracanes más feroces en las costas y el aumento del calor en algunas zonas ya están interrumpiendo el entrenamiento y la preparación militar estadounidense.

    La lección del huracán Michael

    El nuevo plan del Departamento de Defensa cita el ejemplo del huracán Michael en 2018, el cual impactó la base aérea de Tyndall, en Florida.

    Más allá de los 3.000 millones de dólares que costó su reconstrucción, la tormenta dejó fuera de servicio durante meses al principal simulador aéreo del país y el aula de entrenamiento de los aviones de combate furtivos F-22.

    Y esa fue apenas una de varias tormentas e inundaciones que han afectado las operaciones de las bases estadounidenses en los últimos años.

    Desde 2001, el Departamento de Defensa representa hasta el 80% de todo el consumo anual de energía del gobierno de Estados Unidos, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos.

    Loading
    Cargando galería
    Comparte