Durante un discurso en Dallas, Texas, el vicepresidente de EEUU se refirió al tiroteo ocurrido en Florida que dejó 17 muertos y prometió que tanto el presidente Donald Trump como toda la administración trabajarán para darle a las autoridades las herramientas necesarias para afrontar a aquellas personas que luchan contra enfermedades mentales y le causan daños a otros.