Con la modernización del mundo, no es sorpresa que las citas presenciales perdieron algo de influencia para darle hogar a las computadoras y su chance de reunir a personas de todas partes del mundo, no importa la distancia. El cine no se quedó atrás, representando esta nueva manera de enamorarse o, al menos, de tener una oportunidad para abrirse al amor si bien no somos lo que aparentamos en la imagen de perfil.