Un ginecólogo es acusado de abusar sexualmente de 83 mujeres durante las últimas 4 décadas
Un ginecólogo-obstetra ha sido acusado de abusar sexualmente de 83 pacientes -hasta el momento-, durante las citas médicas transcurridas desde 1979.
El Dr. David H. Broadbent ha sido señalado de realizar exámenes invasivos sin usar guantes esterilizados, de gemir mientras manoseaba a las pacientes e incluso de infligirles un dolor innecesario en los procedimientos médicos que prestaba, contó el Salt Lake Tribune.
La denuncia contra Broadbent, médico en el Hospital Utah Valley de Provo, ciudad cercana a Salt Lake City, señala que el hombre se aprovechó sistemáticamente de mujeres y niñas para su satisfacción sexual, haciéndolas sentir “avergonzadas” y “vulnerables”.
El descubrimiento de estos comportamientos comenzó cuando una víctima de Broadbent contó su experiencia en un podcast durante 2021 y varias mujeres se animaron a comentar sus terribles recuerdos con el ginecólogo, incluida una que recordó que el doctor “extrajo manualmente su placenta” después de dar a luz, causándole un dolor insoportable.
Una de las que se animaron a contar su historia fue H.P., quien fue a una primera cita con el acusado en julio de 2020, en la que el especialista jaló sus piernas sin avisarle e insertó un espéculo en su vagina, antes de introducir sus propios dedos.
Sin conocimiento previo en citas con ginecólogos y aunque salió del consultorio incómoda, H.P. dijo que tuvo dos citas más con Broadbent en las que se repitió el comportamiento inapropiado, incluyendo burlas y la complicidad de sus enfermeras, quienes sabían todo lo que estaba ocurriendo.
Tras el impacto provocado por el podcast, en febrero pasado se presentó una demanda contra el doctor, antes de que se sumaran otras 46 mujeres y por último 33 más el pasado martes en una demanda hermana, contó Daily Mail.
Según la denuncia, varios abusos datan de citas médicas realizadas hace 43 años.
El abogado de Broadbent y otros acusados, como el propio hospital, le solicitaron al juez que desestime los casos, al considerar que los demandantes se saltaron una parte primordial al no presentar sus quejas, por medio de la Ley de Negligencia Sanitaria de Utah.
Sin embargo, el abogado defensor de las mujeres considero irrisoria esta petición porque “el abuso sexual no es asistencia sanitaria”.