El caso de la joven acusada de asesinar a sus tres hijos pequeños en California
La Fiscalía de California presentó este miércoles cargos criminales contra una madre hispana de 28 años acusada de asesinar a sus tres hijos, de entre un mes y cuatro años de edad.
Sandra Chico enfrenta tres delitos de asesinato y asalto a un niño que causó su muerte. Su primera comparecencia se programó para la tarde de este miércoles en la Corte Superior del condado de Los Ángeles.
Chico fue arrestada el martes, un día después de que se reportó al 911 que tres niños estaban inconscientes en el interior de su casa en la cuadra 600 de la avenida Ferris en el Este de Los Ángeles. En un principio, los detectives la consideraban una “persona de interés”; sin embargo, tras colectar evidencia y realizar entrevistas la catalogaron como la principal sospechosa de estos crímenes.
Le fijaron una fianza de dos millones de dólares y seguía bajo custodia de la oficina de alguaciles del condado de Los Ángeles. Al momento no se ha revelado la causa de muerte de los menores. Este caso sigue bajo investigación del buró de homicidios de dicho departamento policial.
"En un instante nos quitaron a tres niños inocentes y estamos abatidos”, dijo el fiscal del condado George Gascón en un comunicado. "Nada es más desgarrador que la trágica traición de un padre que no protege a sus hijos", lamentó.
De acuerdo con la Oficina del Médico Forense del condado, las víctimas son Milán Mateas Rodríguez, de un mes de edad; Mason Mateo Rodríguez, de 3 años; y Mía Camila Rodríguez, de 4.
“En la vivienda, los agentes descubrieron que tres niños de tres años o menos no respondían, dos hombres y una mujer. Fueron declarados fallecidos en el lugar”, señala un comunicado de los alguaciles.
“Con base en su investigación preliminar, los detectives arrestaron a su madre biológica Sandra Chico por los tres asesinatos”, agrega la agencia, la cual indicó que no había reportes previos de abuso o negligencia infantil en ese domicilio ni en relación con los niños fallecidos.
Familiares de Chico creen que ella asfixió a sus propios hijos y trató de quitarse la vida el lunes. Los tres menores quedaron acostados en su cama, informó el canal Univision 34 citando a una persona que asegura haber encontrado a los niños en su habitación. “Dicen que fueron asfixiados, que fueron ahogados”, dijo el tío de los menores, Arturo Cerezo, al mismo medio.
La madre de Chico, Rosalba Flores Castillo, aseguró que su hija estaba pasando por una depresión posparto que la habría llevado a quitarle la vida a los niños. “No los torturó. No sabemos qué pasó”, dijo a medios de comunicación al ser cuestionada sobre el incidente. “Estaba entrando en una depresión posparto. No le ayudaron… pasó lo que iba a pasar”, lamentó ella.
La noche del martes se realizó una vigilia en un altar improvisado que se colocó a fuera de la casa de esta familia. Las fotos de los tres pequeños fueron colocadas entre figuras religiosas, crucifijos de madera, flores y veladoras con imágenes de la Virgen de Guadalupe. Vecinos y familiares rezaron un rosario pidiendo por el descanso eterno de los niños. “Oh, María, madre mía”, cantaron entre plegarias.
Una cuenta de GoFundMe que se abrió para reunir fondos para los funerales de los menores había recibido este miércoles más de 18,000 dólares.
Después de la vigilia, Arturo Cerezo, tío de los niños, manifestó que a pesar de la tragedia apoyarán a Sandra Chico. “Hemos recibido mensajes de mucha gente juzgando mal a mi cuñada, que ella es una mala madre. Pero lo único que pido es que no juzguen. Es difícil, pero no juzguen”, expresó.
Expertos señalan que la depresión posparto no es un defecto de carácter o debilidad. Puede tratarse de una complicación del parto que sería controlada con un tratamiento inmediato. La Clínica Mayo explica que los síntomas son depresión, cambios de humor graves, llanto excesivo, aislamiento, dificultad para relacionarse con el bebé, miedo a no ser buena madre, ansiedad y desesperanza.
Si estas señales no desaparecen después de dos semanas es necesario llamar a un médico. Si una madre piensa en hacerse daño o lastimar a su bebé, debe buscar ayuda inmediata de su pareja, seres queridos, comunicarse con su proveedor de servicios de salud o llamar al 911, recomienda la Clínica Mayo.
La línea telefónica de ayuda para quienes tienen pensamientos suicidas es 1-800-273-TALK (1-800-273-8255). La administra la National Suicide Prevention Lifeline (Línea Nacional de Prevención del Suicidio). También existe el webchat suicidepreventionlifeline.org/chat