Familiares dan el último adiós a tres hermanos muertos en explosión de Esparto mientras inicia batalla legal
CONDADO DE YOLO, CA. – Familiares y amigos dieron el último adiós a Jesús, Johnny y Joel Ramos, tres hermanos que perdieron la vida en la explosión de fuegos artificiales que sacudió a la comunidad rural de Esparto el pasado 1 de julio.
El trágico incidente cobró siete vidas en total, dejando una herida profunda en la zona. “Destrozada, pues, ya puse a descansar an mis hijos, pero es un dolor inmenso que no se compara a nada”, expresó Marisol Ramos, madre de los jóvenes fallecidos.
El sentimiento fue compartido por Johnny Ramos, el padre, quien añadió: “Desde el momento que les quitaron la vida a ellos, a mí me la quitaron también”.
Inicia la batalla legal
Mientras las familias continúan en duelo, también comienzan a buscar justicia. La investigación oficial sobre la causa del incendio sigue en curso, pero ya se presentó la primera demanda civil relacionada con la tragedia.
La empresa Ida James Farming, ubicada junto al terreno donde ocurrió la explosión, presentó una querella en el Tribunal Superior del Condado de Yolo. Según la demanda, el incendio arrasó con 24 acres de trigo y 50 acres de frijol canario, generando pérdidas de cientos de miles de dólares.
“Ese incidente destruyó aproximadamente 74 acres de cultivos”, dijo el abogado Chris Rodríguez, socio en Sacramento de la firma Singleton Schreiber, quien representa a la granja afectada. “La comunidad quiere respuestas y nosotros también esperamos obtenerlas”.
La demanda responsabiliza directamente a:
- Devastating Pyrotechnics y su CEO Kenneth Chee
- Black Star Fireworks y su propietario Craig Cutbright
- El teniente del sheriff Sam Machado, dueño del terreno donde presuntamente se almacenaban fuegos artificiales de forma ilegal.
Hasta el momento, ninguno de los señalados ha respondido públicamente a las acusaciones.
“Esto no se cierra todavía”
Marisol Ramos fue tajante: “Ahora es cuando va a empezar la batalla”. Se espera que, en las próximas semanas, otras familias afectadas, incluyendo la de los hermanos Ramos, presenten demandas contra la compañía.
A pesar del dolor, sus seres queridos quieren convertir su pérdida en un llamado urgente para que se rindan cuentas. “Esto no se cierra todavía”, insistió Johnny Ramos.
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