Kim Kardashian se enfrentó en bata a la muerte por mentirle a un asaltante en París

Documentos oficiales del gobierno francés revocan cualquier duda sobre el asalto que sufrió la socialité Kim Kardashian el pasado 3 de octubre, durante su estancia en unos apartamentos de lujo en París.
El periódico francés 'Le Journal du Dimanche' publicó este domingo, en exclusiva, la declaración que ofreció Kardashian, de 36 años, a las autoridades parisinas que acudieron en su auxilio. El relato de la esposa del cantautor Kanye West, comenzó a las 4:30 de la madrugada del 3 de octubre de 2016.
Kimberley Kardashian ofreció sus datos oficiales y de entrada consignó: " Me robaron los teléfonos", pues tuvo que escribir el de su guardaespaldas en el espacio destinado al número para contactarla.
En la denuncia registrada por la policía francesa, Kardashian expuso que se encontraba en París participando en la Semana de la Moda. Tras asistir a una cena que ofreció el modisto Azzedine Alaïa, regresó al 'palacio' en el cual se hospedaba, en compañía de su hermana Kourtney y de Simone Harouche.
Poco después de la 1:00 de la mañana, recordó, subió al segundo piso a trabajar usando su computadora. Escuchó pasos acercándose a la puerta y en voz alta preguntó quién estaba por ahí. Nadie le respondió. "A las 2:56 de la mañana, llamé a mi guardaespaldas. A través de la puerta de cristal vi que dos personas se aproximaban y que el recepcionista del piso estaba atado", declaró.
Tras describir al dúo agresor, Kim Kardashian dijo que con un fuerte acento francés, el asaltante que utilizaba lentes de ski le preguntó específicamente dónde estaba la sortija (de diamantes y valorada en 4 millones de dólares). " Le dije que no sabía y él sacó una pistola. Le mostré dónde estaba (en una mesa junto a la cama). Se mantuvo apuntándome con el arma mientras tomaba la joya... y me preguntaba dónde estaban las demás prendas y el dinero".
Cubierta sólo con una bata de baño, la empresaria fue llevada a la fuerza a la recepción del apartamento, mientras el asaltante buscaba. "Entonces, me volvieron a llevar a la habitación, me empujaron sobre la cama y me amarraron las manos con cables plásticos y cinta adhesiva. Me pusieron cinta adhesiva en la boca y también en las piernas antes de echarme en el baño, específicamente en la bañera", donde la dejaron, según su testimonio.
Kim Kardashian hizo un paréntesis para estipular que cuando la empujaron contra la cama, rebuscaron su bolso, del cual no robaron dinero en efectivo. Sin embargo, junto a la cartera estaba el cofre en el cual guarda sus joyas y se llevaron todo.
"En mi joyero había dos brazaletes Cartier, de diamante; un collar Jacob en oro y diamante; y dos pares de aretes de diamante de Lauren Schwartz y Yanina. Había también tres collares Jacob en oro (...) Un collar de Lauren Schwartz cubierto en diamantes y otro con seis diamantes. Un collar nuevo con el nombre de mi hijo (Saint) en diamante. Otro collar Jacob con una cruz cruzada, un reloj Rolex y dos sortijas de oro amarillo", especificó sobre el botín robado y que en ese momento calculó su valor en 5 millones de dólares.
Tras conseguir su propósito, los ladrones huyeron corriendo, dijo la madre de North y Saint, quien logró desatarse y corrió hacia la habitación de Simone Harouche. Desde ahí contactaron a Kourtney, quien ya había llamado a su guardaespaldas.
Kim Kardashian testificó que no había sido lastimada y pidió a la policía que se le permitiera regresar " con mis hijos a Estados Unidos", lo que así ocurrió.
Hace poco más de una semana, la policía francesa detuvo a 16 personas vinculadas con este asalto, de las cuales tres, incluido el chofer que Kardashian tenía asignado, ya fueron liberadas, pues sólo se les detuvo para obtener su testimonio, no como sospechosos.