María Flores asegura que no tenía dinero para pagar el tratamiento médico de su perrita Fluffy, quien tenía una afección en la patita, por lo que la entregó al Servicio de Animales en Dallas. La mujer pensó que estaba haciendo lo correcto, pero fue arrestada bajo cargos de crueldad animal y ahora enfrenta la posibilidad de la deportación.