Una madre creyó que su hijo de 7 años tenía gripe: el menor terminó con las piernas amputadas, daños en el corazón y en los riñones
Un niño de 7 años, de Flint, Michigan, perdió las piernas tras sufrir lo que parecían “dolores corporales” nada graves durante las pasadas fiestas decembrinas.
Cuando Kaden empezó a quejarse de algunos dolores musculares en una de sus piernas con su madre, Michele Stevenson, ella no le dio importancia, creyendo que se trataba de un efecto secundario de un cuadro gripal, explicó la cadena WNEM.
Tres días después, a Kaden se le hincharon gravemente sus piernas, por lo que tuvo que ser trasladado de emergencia a un hospital donde fue diagnosticado con gripe y con estreptococo del grupo A.
Según el Servicio Nacional de Salud (NHS), esta bacteria suele manifestarse con síntomas similares a los de la gripe, como fiebre alta, inflamación de los ganglios linfáticos y dolores corporales.
Los médicos indicaron que el estreptococo había llegado al torrente sanguíneo de Kaden, lo que le provocó el Síndrome de Shock Tóxico Estreptocócico (STSS, por sus siglas en inglés).
Cuando esto ocurre, el paciente puede sufrir rápidamente hipotensión arterial, fallo multiorgánico e incluso la muerte, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Sin embargo, a pesar del rápido tratamiento implementado por intentos doctores, al final fue demasiado tarde para evitar la amputación de las piernas de Kaden, cuando los músculos y tejidos de sus extremidades inferiores quedaron destruidos.
“Al final tuvieron que amputarle la pierna derecha por encima de la rodilla y la izquierda por debajo de la rodilla", contó Stevenson.
Una complicada recuperación
Stevenson le dijo a la cadena ABC12 que Kaden también sufrió una reacción inmunitaria que daño su corazón y sus riñones, además de que tuvo miedo de que tuvieran que amputarle también sus manos, las cuales estaban igual de inflamadas que sus piernas.
“Estoy agradecida de haberlas salvado”, señaló la mujer.
Luego de que su hijo fue dado de alta, Stevenson asegura que ahora tiene el gran reto de acostumbrar a Kaden en su nueva vida, además de encontrar una nueva casa que sea más accesible para el pequeño.
“Donde vivimos actualmente no va a poder estar con su silla de ruedas y hacer cosas de forma independiente”, dijo.
Los amigos y familiares de Stevenson han creado una página en GoFundMe para recaudar dinero para ella y Kaden.