Un hombre muere tras ser obligado a hacer 300 sentadillas por violar el toque de queda por covid-19
Un hombre que violó un toque de queda por covid-19 falleció el pasado 3 de abril, luego de haber sido obligado a hacer 300 sentadillas como castigo.
Darren Manaog Peñaredondo tenía 28 años cuando decidió salir de su casa para comprar agua en General Trias, una ciudad de la provincia filipina de Cavite, la cual permanece bajo un fuerte bloqueo debido a un considerable aumento de contagios de coronavirus, de acuerdo con el portal Rappler.
El 2 de abril, al ser identificado en la calle pasadas las 6 p.m. -hora establecida para le toque de queda-, Peñaredondo fue arrestado por oficiales de la policía, los cuales le pidieron hacer 100 sentadillas como castigo, aunque le hicieron repetirlo un par de veces más.
Reichelyn Balce, compañera de residencia de Peñaredondo, dijo a medios locales que vio a Darren muy cansado y molesto por el castigo que se le había impuesto.
Un día después, Darren sufría para moverse debido a la fatiga e incluso tuvo que gatear para poder moverse. De pronto, cuando se disponía a ir al baño para orinar, comenzó a convulsionar y a pesar de que sus familiares pudieron ayudarlo la primera vez, la segunda vez que su cuerpo colapsó quedó en estado de coma.
Filipinas ha contabilizado más de 819,000 contagios y 14,000 muertes por coronavirus, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins y en marzo pasado el país sufrió un aumento drástico de casos, por lo que las autoridades decidieron encerrar a más de 25 millones de personas.
El jefe de la policía local, Marlo Nillo Solero, negó las acusaciones por parte de la familia Peñaredondo, asegurando que las sentadillas no forman parte de los castigos para los infractores de la cuarentena.
Sin embargo, el subsecretario del departamento, Jonathan Malaya, le dijo a CNN que “todos los agentes de policía que se demuestre que han violado la ley serán procesados y sancionados”.
El alcalde de General Trias, Antonio Ferrer afirmó que ya les ha ofrecido el pésame a la familia de Peñaredondo y que además les aseguró el caso “se aclararía”.
La muerte de Peñaredondo forma parte de una serie de incidentes relacionados con brutales acciones policiales que han sido denunciadas por diversas organizaciones, incluida Human Rights Watch (HRW).
En marzo, HRW emitió un comunicado en el que señaló que cinco jóvenes habían sido encerrados en una jaula para perros y un par de personas fueron obligadas a sentarse en pleno sol por un largo tiempo, ambos casos por violar el toque de queda establecido para mitigar la propagación del covid-19.
Este comportamiento de los oficiales acompaña el discurso extremista del presidente Rodrigo Duterte, quien precisó en abril del 2020 durante un discurso que la policía mataría a tiros a cualquiera que violara las restricciones por coronavirus. “No dudaré. Mis órdenes son para la policía y los militares: si se vuelven rebeldes dispara y mata”, dijo.