No pocos en el mundo usamos hoy en día un microondas, tanto para calentar comida como para cocer alimentos. Sin dudas, resulta un equipo útil en las cocinas, pues reduce considerablemente los tiempos de cocción, lo que nos agiliza la vida. Sin embargo, podemos estar preocupados por los efectos que tendría sobre nuestro cuerpo el empleo sostenido de tales tecnologías.