Salió libre al día siguiente: se robó un autobús, chocó con una veintena de coches y tiroteó a la policía
Cuando Damián, un dueño de autobuses escolares, vio que una de sus unidades estaba siendo robada por tres individuos, justo a la vuelta de su casa, metió de inmediato al perro que paseaba, llamó a los servicios de emergencia y comenzó a seguir a los ladrones en su vehículo.
En plena noche en Buenos Aires, Argentina, Damián empezó a perseguir a los asaltantes, sin estar consciente de que iban armados y sin imaginar de la persecución violenta y descabellada que estaba por generarse, contó La Nación.
Durante más de 20 kilómetros, uno de los ladrones identificado como Carlos Alberto Cáceres, de 43 años, condujo el autobús por varias avenidas y calles mientras era perseguido por unas 15 patrullas, a las cuales les disparó, y en su paso chocó a 16 automóviles, una ambulancia y cuatro vehículos de la policía.
La persecución, que se hizo viral de inmediato en redes sociales gracias a los videos que grabaron diversos testigos que fueron viendo pasar el autobús a toda velocidad, terminó cuando los uniformados lograron disparar contra las llantas del autobús, por lo que Cáceres perdió el control del volante.
Aunque la policía se acercó para detener a los asaltantes, solo pudieron arrestar a Cáceres ya que sus dos cómplices lograron escapar y se encuentran prófugos de la justicia.
Por si fuera poco, el arma con la que el imprudente conductor abrió fuego no fue hallada dentro del vehículo.
"Esto es un desastre, podría haber sido peor. Me aconsejaron que no me acercara porque estaban armados. Le pido disculpas a toda la gente que estuvo en el accidente", dijo Damián, quien les perdió el rastro a los pocos minutos de haber empezado a seguirlos y dejó todo en manos de la policía.
“Esto no sirve más”
Luego de ser detenido, la policía supo que Cáceres contaba con un largo andar delictivo que comenzó en 1996 cuando fue acusado de robo con a penas 18 años. Desde aquel momento, el hombre no paró de asaltar y ser aprehendido, además de que cuenta con otras tres causas e incluso una por violencia de género contra una de sus exparejas.
A pesar de estos antecedes, de las imágenes compartidas en redes sociales y de los graves daños que causó al volante, Cáceres pasó la noche en la comisaría y a la mañana siguiente quedó en libertad, según le confirmaron fuentes judiciales a Clarín.
“Esto no sirve más. Yo todavía no puedo dormir y a este ya lo liberaron. Es increíble”, se quejó sorprendido Damián.
