Samantha Figueroa de 32 años, enfrenta cargos de abuso infantil, después que su hijastro contó en la escuela que ella lo golpeó en la cabeza dos veces, con un palo de madera. Supuestamente, se molestó, porque en vez de dormir, él estaba con un videojuego. El menor tuvo heridas y cuando comenzó a sangrar, la madrastra le pidió que se bañara.