Final de Treme
El primer capítulo de esta última temporada de la serie Treme empezaba con la ciudad de New Orleans votando al que sería el primer presidente negro de la historia de Estados Unidos. Al final del previo, mientras la gente celebra la victoria de Obama, un músico se acerca al cruce entre dos calles; por ambos lados sirenas de la policía, Obama es presidente de Estados Unidos, ¿pero realmente ha cambiado alguna cosa?
Quizás podríamos hacernos la misma pregunta sobre los personajes de Treme, ¿después de cuatro temporadas han cambiado o siguen igual que en el primer episodio? En esta última temporada parece que se ha hecho especial hincapié en este aspecto, en el intento de dar un nuevo aire a las vidas de muchos de los personajes de la serie.
No es fácil cambiar
El primer adiós, prematuro, fue el del gran jefe indio Albert Lambreaux. El carismático personaje interpretado por Clarke Peters muere de cáncer en un penúltimo capítulo que retrata dignamente los últimos días de vida de un enfermo terminal. Su hijo Delmond Lambreaux ( Rob Brown) está a su lado hasta el final. Una vez muerto su padre decide quedarse y terminar la casa donde cuidará a su futuro hijo. Un pie en New York y el otro en New Orleans para no perder su carrera musical.
DJ Davis ( Steve Zahn) intenta dar un cambio a su vida una vez cumple los 40. Su bautizo vestido de traje en el Mississipi como Sr. McAlary nos hace creer que abandona la vida despreocupada que ha llevado hasta el momento. Aunque como New Orleans, el cambio no puede ser tan radical como pretende Davis y pronto vuelve a las andadas con nuevos proyectos musicales.
Davis termina quedándose con Janette Desautel ( Kim Dickens), quien después de haber demostrado lo fantástica cocinera que es, solo termina pudiendo recuperar el nombre de su restaurante gracias a la intervención del tejano Nelson Hidalgo ( Jon Seda). Un Hidalgo que llegó a New Orleans con la única intención de hacer negocios y termina irremediablemente enamorado de la ciudad.
La pareja formada por el teniente Terry Colson ( David Morse) y la abogada Antoinette Bernette ( Melissa Leo) no termina junta. Los dos se apuntan sendas victorias en su lucha contra la corrupción en la policía de New Orleans. Colson lo paga teniendo que dimitir, para la abogada solo es una victoria que compensa las miles de trabas y derrotas burocráticas que sufre a diario. Pero al final, una victoria que la sigue empujando en la dirección correcta. Colson se marcha a Indinapolis para estar cerca de sus hijos, ¿pero qué creéis? ¿Aguantará mucho allí o volverá a New Orleans? Yo apuesto por lo segundo.
La música en Treme
David Simon rinde homenaje a New Orleans en Treme. Y si hablamos de New Orleans, hablamos de música y músicos que sienten pasión por ella, por la música y la ciudad. Todo ello es lo que vemos reflejado en la serie Treme.
Otro de los personajes que parecen sentar la cabeza es Antoine Batiste ( Wendell Pierce). Pierce vuelve a encandilarnos con este trombonista borrachín de buen corazón. Batiste nos muestra como nadie la noche en la ciudad de New Orleans y lo complicado que es seguir el ritmo de los bolos musicales en Treme. Sin duda que echaremos en falta las lecciones del profesor Antoine Batiste y seguiremos muy de cerca los próximos proyectos de Wendell Pierce.
Una de las pocas que parece apuntarse un verdadero triunfo es la violinista Annie Tee ( Lucia Micarelli). Tee nos muestra lo complicado que es llegar a tener cierto éxito comercial en el mundo de la música. Finalmente termina haciendo un trato con su agente, que le permite tener libertad musical, pero a cambio la obliga a tener que venderse según los dictados de su agente.
Una de las últimas escenas es la canción que le dedica Annie a Sonny ( Micheil Huisman) el músico que le enseñó a amar la ciudad de New Orleans. Un Sonny que cada vez ha ido teniendo menos protagonismo en la serie, pero al que hemos visto felizmente casado con la vietnamita Linh (Hong Chau). Aunque eso no quita que siempre que aparece la oportunidad vuelve a coger su piano y ponerse a tocar en cualquier lugar.
Y por último LaDonna ( Khandi Alexander). Qué podemos decir de LaDonna que no sea que es la mujer más sufrida que Simon ha dibujado nunca. Si los golpes que sufrimos en la vida nos hacen fuertes, LaDonna Batiste-Williams debe ser la mujer de hierro. Con un hermano desaparecido y encontrado muerto, dos ex maridos a sus espaldas, dos hijos, una violación y unos vecinos extorsionadores. LaDonna sufre finalmente la muerte de Albert Lambreaux con quien había establecido una relación sentimental. Un personaje que desprende fuerza con la interpretación de una Khandi Alexander que se come la pantalla cada vez que aparece en ella.
Adiós a Treme
Al igual que en la canción de despedida, nosotros también echaremos en falta la ciudad de New Orleans. Echaremos en falta a todos estos personajes de Treme que nos han mostrado el día a día en una ciudad devastada por el Huracán Katrina. La lucha de cada uno de ellos para seguir adelante y recuperar sus vidas. Echaremos en falta el Mardi Gras y los vestidos indios. Y sin duda, echaremos en falta la fantástica banda sonora del barrio de Treme.
Quizás ahora que ya ha terminado la serie reciba el reconocimiento que merece. Cuatro temporadas y cinco capítulos en esta última es muy poco para los que nos consideramos fans de la serie. Y porque el creador es David Simon, que si no todo parece indicar que nos hubiéramos quedado sin poder disfrutar ni tan siquiera de un final para Treme. Sus bajas audiencias la condenaron, pero quién sabe, ya pasó con The Wire y Deadwood, ahora quizás empieza a recibir alabanzas y termina convirtiéndose en la serie de culto que ya es. Que este artículo sea un pequeño homenaje de uno de sus más incondicionales seguidores.
El final de Treme es para una clase de música vacía, lo que significaba para muchos de nosotros la serie de Treme: una lección de buena música.
Y para el bache, el famoso bache que ya era uno más del paisaje en Treme. Arreglado, por fin, aunque habiendo respetado toda la decoración que había acumulado durante el tiempo que llevaba allí. Unos metros más adelante hay otro bache, ya se arreglará, como en New Orleans, todo a su tiempo, poco a poco. Como ha sido la propia serie; calmada, para saborear despacio, sin prisas. Simplemente siéntate y disfrútala.