Varios policías perseguían al hombre, acusado de violencia doméstica. Cuando el fugitivo se bajó del coche, los agentes se dieron cuenta de que llevaba una cadena en la mano y le dispararon con una pistola eléctrica, pero él siguió en pie.
Dos sujetos fueron los protagonistas de la persecución, casi logran perder a los policías pero al llegar a una intersección el vehículo impacta a un camión y los hombres para salir del auto y huir en direcciones diferentes. Pero las autoridades los atraparon y ahora enfrentan cargos.
La Policía iba tras un conductor que al verse alcanzado se bajó de su vehículo y empezó a correr por la autopista. Un uniformado utilizó una pistola eléctrica para paralizarlo y evitar que fuera arrollado.