En 2017 fallecieron 56 millones de personas, y de ellos casi la mitad era mayor de 70 años. Esta lista, basada en los datos más recientes analizados por Instituto de Métricas y Evaluación de Salud de la Universidad de Seattle, muestra que los desastres naturales, el terrorismo o las guerras son mucho menos mortales que las enfermedades no infecciosas.