Johan Ramírez, de 13 años de edad, se ganó el nombre del ‘Niño Ángel’ por ayudar a los rescatistas y a los sobrevivientes de accidente que cobró la vida de 71 personas. El menor se abrió paso con su padre entre la oscuridad de una peligrosa selva para salvar las vidas que pudieran a pesar de haber perdido esa misma noche el trabajo de todo un año.