El dragón chino es el amuleto perfecto

1/22

Comparte

El dragón es sin duda uno de las criaturas más importantes de la mitología china. Representa varias cosas, sobre todo el poder, la dignidad, éxito y prosperidad. Por ello, solo el emperador y altos oficiales del gobierno podían llevar dragones bordados en sus ropas. Crédito: Shutterstock

2/22

Comparte

Par los chinos el dragón representa el espíritu de la tierra y del cielo. También, que encarna el llamado 'chi', esa energía vital que forma parte de todos los seres y que la criatura suelta con su aliento. Es una gran fuente de poder, prosperidad y felicidad. Crédito: Shutterstock

3/22

Comparte

Desde los inicios de su civilización, el dragón era una imagen muy adorada, sea en tótems, artefactos y también, amuletos, pues creían que venerarlos les traería no sólo protección, sino buena suerte en general, al grado que incluso gente era ofrecida en sacrificios a dragones. Crédito: Shutterstock

4/22

Comparte

El número nueve se considera de suerte en China, y los dragones chinos están frecuentemente relacionados con él. El nueve es el número más grande de los números yang, que representa el fin del camino y el inicio de un nuevo principio, un ciclo renovador y próspero. Crédito: Shutterstock

5/22

Comparte

Procura tener alguno de estos amuletos en tu casa o negocio y verás cómo se irán las malas energías para darles paso a las cosas positivas.

6/22

Comparte

También se cree que un dragón chino está formado por partes de nueve animales cola de serpiente, ojos de langosta, cuernos de ciervo, patas de buey, nariz de perro, bigotes de pez bagre, melena de león, escamas de pez y las garras de un águila. Crédito: Shutterstock

7/22

Comparte

Así que además de aportar protección, buena suerte y paz, fomenta las cosas buenas y la nobleza del alma. Es por esto que es bastante recurrido como amuleto en la tradición china, algo que podemos retomar para evocar su simbolismo de nobleza, poder y gran fuerza. Crédito: Shutterstock

8/22

Comparte

El dragón chino, al representar lo divino, al ser portado como talismán, otorgará a quien lo tenga o porte mucha seguridad, protección, atrayendo la buena suerte y 'alimentándose' de las fuerzas naturales y cósmicas que hace de la criatura algo tan venerado por los chinos. Crédito: Shutterstock

9/22

Comparte

Las antiguas tradiciones chinas aseguran que el dragón, como una de las criaturas celestiales, personifca el dominio sobre los cuatro elementos -tierra, agua, fuego y aire-, dado que puede volar, vivir en tierra o agua y arrojar con su aliento tanto fuego como agua. Crédito: Shutterstock

10/22

Comparte

Al obtener un dragón como amuleto, se transmitirá poder, prosperidad y buena fortuna tanto a personas como sus familias, con la curiosa superstición de los únicos que no deben obtenerlo son aquellos que nacieron en el año del perro (los nacidos en 1934, 1946, 1958, 1970, 1982, 1994, 2006 y 2018) porque este animal es contrario a los dragones en la astrología china. Crédito: Shutterstock

11/22

Comparte

El dragón también es importante dentro del Feng Shui, pues ahí también representa abundancia, prosperidad, poder, seguridad, protección, buena salud, buena suerte, divinidad, sabiduría, éxito y divinidad, por lo que es recomendable para la decoración. Crédito: Shutterstock

12/22

Comparte

En Feng Shui, la figura del dragón es comercializada en distintos colores y materiales, como cerámica, distintos tipos de resinas o piedras, inclusive el poderoso jade. Hay de muchas tonalidades, aunque quizá las más populares son las verdes y doradas. Crédito: Shutterstock

13/22

Comparte

El verde y dorado o amarillo simbolizan la riqueza y prosperidad, por eso son tan populares, pero también encontrarás figuras en tonos azules, negros, rojos y otros tonos. Además, hasta en varios tamaños, como en este pequeño dije de ejemplo. Crédito: Shutterstock

14/22

Comparte

Aunque su posición suele variar, la más común es con la cabeza en alto y hay algunas que hasta sostienen orbes o perlas con sus garras, siendo una alegoría a la protección y buena fortuna que les va a proveer. Crédito: Shutterstock

15/22

Comparte

Estos dragones usados como amuletos suelen llamarse comúnmente Pi Yao o Pi Xiu, también nombrados 'bixie' o 'Tian lu'. Estas criaturas se cree que son capaces de atraer riqueza, buena suerte y alejar la mala fortuna y negatividad - un amuleto ideal. Crédito: Shutterstock

16/22

Comparte

De cualquier manera, recalcamos que aunque el principio es el mismo, no todos los dragones son iguales. Hay unos Pi Yao que son considerados más sencillos y aptos para proteger tu hogar u oficina, quizá de materiales más 'normales', como cerámica, latón o metal. Crédito: Shutterstock

17/22

Comparte

Hay unos Pi Yao o Pi Xiu que juntan a dos dragones, ya no sólo uno, dentro del Feng Shui, para atraer múltiple riqueza y buena suerte a diversos espacios. Crédito: Shutterstock

18/22

Comparte

Hay otros dragones que solamente se usan para atraer la buena suerte en las apuestas y el azar, para que tu negocio prospere, o sea, más inclinados al lado económico. Crédito: Shutterstock

19/22

Comparte

Los puedes colocar en muchos lados, pero no en determinados espacios. Por ejemplo, en tu casa, para protegerte, lo colocas en un lugar con la cabeza hacia la ventana o de lado hacia la puerta, un espejo o tu cama. Crédito: Shutterstock

20/22

Comparte

No obstante, jamás hay que poner un dragón de estos en los baños, o espacios cerrados como un garage, armario o clóset, porque la energía no es la mejor. Crédito: Shutterstock

21/22

Comparte

También hay quienes creen que jamás hay que poner más de dos dragones juntos porque un tercero puede causar un triángulo malicioso que bloquee todo lo bueno que quieres, y además, que contar con más de cinco en tu casa ya afectará todo tu ambiente. Crédito: Shutterstock

22/22

Comparte

Es así como podemos beneficiarnos de un dragón chino como amuleto para obtener protección, seguridad, buena suerte y prosperidad, alejando las energías negativas y espíritus malignos, algo que los chinos han adoptado desde hace siglos. Crédito: Getty Images