En el día de la celebración de la Virgen de la Caridad del Cobre, este cubano fue a la Ermita de Miami, para cumplirle una promesa. Le había pedido a la patrona de Cuba que salvara a su hija menor de un año, a quien el covid-19 le amenazaba la vida. También pidió por quienes sufren en la isla y por la reunificación de miles de familias.