Esta es la segunda confirmación de un magistrado al máximo tribunal de justicia que consigue Trump durante su mandato. Con una reñida votación, 50 a favor y 48 en contra, Kavanaugh ocupará un puesto vitalicio en el Tribunal Supremo. Tras la decisión del Senado, cientos de manifestantes protestaron y aseguraron el juez no representa los intereses de la comunidad.