¡Qué orgullo! Una maestra argentina entre las 50 mejores del mundo
Silvana Corso es una profesora de historia de 46 años que acaba de ser nominada al Global Teacher Prize, que premia al mejor maestro del mundo con 1 millón de dólares. La docente es Directora de un colegio secundario público de la Ciudad de Buenos Aires al que asisten más de 500 adolescentes en situación vulnerable.
La Escuela de Educación Media Nº 2 está ubicada en el barrio porteño de Villa Real, a pocos kilómetros del barrio Fuerte Apache. De allí provienen la mayoría de los alumnos, los cuales padecen en su mayoría condiciones como espina bífida, esquizofrenia, hidrocefalia y parálisis cerebral.
En sus 10 años en la escuela, Silvana hizo de la inclusión un pilar central de su trabajo como docente y directora. No solo hizo foco en la integración de chicos en situación de riesgo, sino que buscó ampliar el concepto de vulnerabilidad integrando alumnos con discapacidades físicas y mentales.
Una experiencia que le marcó la vida
Silvana vivió esto en carne propia como madre. Su hija, Catalina, sufrió parálisis cerebral producto de una asfixia con el cordón umbilical al momento del nacimiento y falleció en 2009 debido a una infección pulmonar de la que no se pudo recuperar.
No obstante, a pesar de todas las dificultades y barreras que esta condición impone en el organismo, Catalina pudo integrarse en un jardín de infantes común y comenzar allí su escolarización. Esto marcó el camino de Silvana para siempre.
Tras la muerte de su hija, Corso comenzó a especializarse en la inclusión de personas con capacidades diferentes, realizando diplomaturas en el FLACSO, la Universidad Central de Chile y la Universidad de Salamanca.
Su misión hoy
Hoy, la escuela que dirige integra alumnos con esquizofrenia, microcefalia, parálisis cerebral, psicosis, Síndrome de Asperger, Down y Tourette, así como Trastornos de Espectro Autista y de Desarrollo.
«En nuestra escuela no hay barreras, no importa los problemas con los que los chicos lleguen. No hay selección alguna. Se los incluye a todos», comenta Silvana en una entrevista al diario La Nación.
El ganador del premio se conocerá en marzo del 2017. De obtener el galardón, la maestra destinará el dinero a mejorar las condiciones edilicias del colegio, ya que los chicos en silla de ruedas dependen de rampas en mal estado y un ascensor que todavía no llegó.
Sin dudas un ejemplo inspirador que nos demuestra una vez más que ante la adversidad, no hay barrera que no se pueda superar.