Captan en video el caos que se vivió durante tiroteo en las afueras de una funeraria en Chicago
CHICAGO, Illinois. - Una balacera que se registró el martes por la tarde en las afueras de una funeraria en Chicago dejo 15 heridos y unos 60 casquillos tirados en las calles.
El incidente ocurrió en la intersección de las calles 79 y Carpenter, en el barrio de Auburn Gresham, mientras se realizaba el funeral de un hombre que murió baleado la semana pasada en el contexto de un conflicto entre pandillas, que a la vez estaba relacionado con un tiroteo previo, dijeron este miércoles las autoridades.
La confrontación tuvo lugar luego de que un vehículo Malibu se acercó hasta donde estaban reunidos varios individuos y uno de los ocupantes empezaron a dispararle al grupo. Las víctimas estaban armadas y abrieron fuego contra los atacantes. El vehículo luego chocó y las personas a bordo huyeron a pie. Se pudo determinar que era un auto robado, pero aún no se sabe cómo o cuando, según el relato de Brendan Deenihan, jefe de detectives de la Policía de Chicago (CPD).
Por su parte, David Brown, el superintendente de la Policía, dijo que miembros de bandas rivales seguían repitiendo un ciclo de violencia y venganza.
“No podemos seguir respondiendo a la violencia con más violencia. Aquello de ojo por ojo ciega a ambas partes, está destruyendo familias y perpetuando un ciclo interminable de víctimas de balaceras noche tras noche”, agregó Brown.
Entre las personas baleadas en el funeral hay dos hombres en sus 30 años a quienes la policía conoce. Ambos se encuentran en estado grave, mientras que el resto de los heridos fueron atendidos y se espera que se recuperen, según CPD.
Este tiroteo es solo el más reciente en una serie de hechos relacionados con violencia armada en Chicago y en las principales ciudades de los Estados Unidos en los últimos meses. Violencia que coincide con el final de los bloqueos relacionados con el covid-19, protestas masivas contra la violencia policial y el verano, cuando el crimen aumenta cada año.
Esta misma semana se conoció que el Departamento de Seguridad Nacional se estaría preparando para desplegar alrededor de 150 agentes federales en Chicago, por instrucción del presidente Donald Trump bajo el pretexto de ayudar a controlar la violencia.
Una persona de interés fue detenida para ser interrogada según la policía antes de decir el miércoles por la tarde que había sido liberada.