Miembros de la caravana de migrantes centroamericanos que decidieron seguir su lucha en busca del sueño americano abordaron el vehículo a las afueras de Ciudad de México, pese a los peligros que representaba el recorrido. Bebés, ancianos, niños y adultos soportaron riesgos, cambios del clima, hambre y sed durante la travesía hacia Estados Unidos.