Desde la gran ciudad de Buenos Aires, Argentina, directamente a nuestro correo de envíos, algunos días atrás nos llegaron las perforaciones y dilataciones lobulares de Camila, quien se autodefine como una verdadera adicta a este arte. Conoces perfectamente esta sección, así que sin más, pasemos a conocer los excelentes piercings de nuestra amiga Camila.
Piercings en el ombligo y expansiones lobulares
Bueno, como tanto nos gusta, nuestra amiga Camila nos hizo un largo, completo y excelente desarrollo sobre sus perforaciones. Ella nos contó muchas cosas interesantes sobre sus piezas y la verdad es que lo mejor será ver lo que ella nos dijo en sus propias palabras:
“(...) A mis padres nunca le gustaron en realidad las perforaciones o los tatuajes, solamente tenía las dos perforaciones en los lóbulos de las orejas común. Un día, una amiga en el colegio comentó que se había hecho un arito más en la oreja, y bueno... me gustó. Entonces pedí permiso y solo mi mamá me dejó. Me lo hice yo sola, con un abridor; pero me lo hice mal, entonces dejé que se cerrara y me lo volví a hacer. Así fue que me hice varios, luego me gustó muchísimo el piercing del ombligo y estuve meses molestando a mis padres para que me dejaran, finalmente me hice la perforación del ombligo en un estudio local, y me costó unos $ 55 argentinos (USD 10 aproximadamente).
En las vacaciones no se cómo, me agarró lo que yo llamo "locura por hacerme expansores”. Estuve casi todo el verano pensando en que quería hacerme los más pequeños (2 o 4 mm), y cuando tuve la oportunidad, yo misma me compré el cuernito y me los hice, pero... no empecé como debía, y desde una perforación normal pase a 6 mm. Creí que iba a quedarme ahí, pero luego de unos meses quise agrandarme y pase de 6 a 8, luego a los 10 mm y... supongo que quedaré ahí. Por ahora... Yo si quiero hacerme una perforación, no lo pienso dos veces y lo hago. Todo esto me lo hice porque realmente me gusta como quedan. Planeo más adelante hacerme el septum, y otras perforaciones más en la oreja...”
Bueno, todo esto fue lo que tan amablemente nos estuvo contando nuestra amiga Camila, una adicta al arte corporal por naturaleza. Ahora, cabe mencionar que como lo hemos aclarado varias veces, no estamos de acuerdo en que uno se haga sus propias perforaciones, en condiciones poco adecuadas y sin tener los conocimientos necesarios previamente.
¿Tú qué opinas al respecto? ¿Te has hecho algún piercing tú mismo? Cuéntanos en la sección de comentarios y si te interesa compartir tu historia con nosotros, no olvides que puedes hacerlo escribiéndonos a nuestro correo de envíos.