Abuela y nieta son echadas en pijama de un hotel por dejar una mala reseña de la habitación en internet
Cuando Susan Leger reservó aquella habitación en el Baymont Inn & Suites por medio de hotels.com, la mujer de 63 años imaginó una estadía placentera de tres días con su pequeña nieta en la ciudad montañosa de Helen, Georgia.
Sin embargo, después de hacer el check-in en aquella tarde de septiembre, subiría a su habitación solo para descubrir que se trataba de un cuarto muy deteriorado en el que el inodoro no funcionaba de forma correcta; para colmo, ni siquiera la piscina del establecimiento estaba disponible.
Por eso, cuando hotels.com le envió esa misma tarde el rutinario correo electrónico para que calificara su habitación, Leger apeló a su honestidad y calificó con 3 estrellas (de 5 posibles), contó la cadena WXIA.
Luego, a las 8:40 p.m., ya cuando ella y su nieta de seis años se disponían a descansar ya con pijamas puestas, su celular sonó y al responder encontró la voz enfurecida del gerente del hotel, quien le reclamaba su mala reseña y le ordenaba salir de inmediato del establecimiento.
Todavía en medio de la incredulidad, Seager pronto escuchó unos fuertes golpes en la puerta y al abrir vio parado frente a ella a un oficial del Departamento de la Policía de Helen, quien había respondido el llamado del gerente para que sacara la abuela y a la niña.
“¿Realmente pueden echarme en medio de la noche, de un hotel por dar una mala reseña?”, le preguntó Seafer al oficial, quien le respondió que por ley podía hacerlo y las escoltó hacia el lobby, antes de acompañarlas a otro establecimiento al que abuela y nieta tuvieron que caminar en pijama.
En Georgia se les exige a los hoteles que avisen con suficiente tiempo de anticipación antes de expulsar a cualquier cliente. Sin embargo, existen excepciones que les permite hacerlo de inmediato por motivos como “no pagar el dinero acordado, violar reglas del establecimiento u otra acción por parte de una huésped”; este último motivo resulta tan vago que puede incluir una reseña negativa.
En un informe de policiaco, el oficial William Barrett confirmó que la única razón para la expulsión de las huéspedes había sido la mala crítica que el hotel recibió, señaló el Daily Mail.
Asimismo, durante la llamada al servicio de emergencias por parte del gerente, se le puede escuchar diciéndole al oficial que iban a reembolsar el dinero pagado por la mujer (unos 75 dólares por cada una de las tres noches) y así poder echarla del sitio.
El gerente del hotel, Danny Vyas, le dijo a la televisora que tuvieron que dejar ir a Seager porque ella no estaba feliz con su habitación y que la abuela había llamado unas 11 veces en una hora, por lo que las múltiples quejas terminaron de molestar al hombre.
Si bien Seager recibió un mail de hotels.com en el que le decían que “desafortunadamente” no se habían podido comunicar con el hotel, por lo que “los reembolsos no están permitidos”, días después de que la historia tomara relevancia, el sitio web le devolvió a la abuela la cantidad completa de lo que había gastado.
