La actriz rusa compartió que no ha podido superar el miedo que le ocasionó la caída de un caballo en febrero pasado. La pareja de Gabriel Soto estaba practicando equitación y sufrió un accidente que la marcó y le impidió volver a montarse a un caballo por meses. Irina está trabajando para vencer el "miedo y la desconfianza" que le generó esta caída y el pasado 18 de agosto retomó esta actividad.