Eduardo Yáñez opina sobre el caso de Livia Brito y dice que él también habría golpeado al fotógrafo
Livia Brito estuvo en medio de la polémica luego de que golpeara y presuntamente le robara la cámara a un paparazzo que la fotografió junto a su pareja durante sus vacaciones en la Riviera Maya en julio de 2020. Eduardo Yáñez, quien también vivió un episodio de violencia con un reportero, opinó sobre el caso de la actriz.
El protagonista de 'Fuego en la sangre' señaló que ambas partes son culpables y dijo que también habría reaccionado como la cubana: "Si tú eres un paparazzo y ves que yo estoy de vacaciones con mi pareja, bien de tu parte si vienes y me dices '¿Te puedo hacer unas tomas?', no importa (que estés en un lugar público), pero sí está vacacionando", dijo en el programa 'Sin afán de molestar' de la periodista Laura Estrada.
Yáñez asegura que el fotógrafo debió pedir permiso: "Si el paparazzo viene y me dice: 'Oye me enteré que estás aquí, déjame hacerte unas fotos', yo te aseguro que la chava (Livia) no hace ped…, pero si se está haciendo el escondido y haciéndola de ped…, la verdad yo sí lo agarro a madrazos, claro que sí", dijo.
Laura Estrada cuestionó si hubiera golpeado al paparazzo y el histrión rectificó su declaración: "No, no, no sabemos cuál fue la discusión, no sabemos cuál fue el intercambio, ni tú ni yo estábamos ahí", hizo hincapié.
La justificación de Eduardo
"Tú como ser humano vas a reaccionar, una acción hay reacción, quizá Livia se sintió asaltada, insultada, allanada en su intimidad, y se prendió, es válido", agregó en el show.
La estrella de telenovelas sabe que la ley castiga la violencia, sin embargo, el enojo del momento ciega sus acciones, por lo cual prefiere no compartir su postura sobre el caso de la cubana.
"Yo no puedo juzgar si estuvo bien o si estuvo mal porque seguro me meto en un problema, porque si por ley hablamos pues no debió haber golpes, pero a mí me sucedió lo mismo, en ese momento ves negro, no analizas, no piensas, no nada, te ciegas y ves negro, me metí en un problema legal, pero tampoco hay derecho en provocar estas situaciones", dijo respecto al incidente que vivió en 2017 cuando le dio una bofetada al entonces reportero de El Gordo y La Flaca, Paco Fuentes.
Eduardo defiende a Livia sobre el supuesto robo de la cámara
Ernesto Zepeda, el fotógrafo agredido, señaló a Livia Brito de haberlo golpeado y robado su equipo de trabajo, Yáñez opinó al respecto.
" No es robarle, yo creo que es una visión de venganza, tú me ch… a mi intimidad ahora te quito esto, porque yo no creo que ella tenga necesidad de robarse eso", dijo a Laura Estrada.
Además, refutó la presunta postura del lugar donde sucedieron los hechos: "Por ejemplo, los dueños del hotel vinieron a hacer ped…, 'se portó bien pesada, que no sé qué', pues qué cul… porque la señorita escogió su lugar para ir con su pareja a vivir un momento padrísimo, esa es la idea. Si ellos todavía autorizan que alguien escondido les tome fotos qué poca madre, porque uno se fue a gastar ahí su dinero, sabiendo que ibas a tener cierta intimidad, quizá no tanta", agregó en la entrevista.
El actor sabe a lo que se expone al ser una figura pública
Eduardo Yáñez está consciente que al ser famoso podría ser captado en cualquier momento que pise un lugar público, por lo cual sabe cómo debe actuar si no quiere ser visto.
"Sí yo tengo una pareja y no quiero que me vean, no salgo, si yo voy a llevar a mi pareja a cenar a un restaurante sé que voy a un lugar público y tengo que adaptarme a eso", señaló.
Su carácter lo ha metido en problemas
Eduardo está en contra de los medios de comunicación que lo provocan para sacar notas y que se repita lo mismo que vivió en 2017 con Paco Fuentes: "Después de ese incidente hay periodistas que han hecho sus preguntas a modo de molestar provocándome a que yo explote de la misma manera, eso no está chido (bien)".
Incluso, pidió respeto al público, con quien también ha vivido algunos enfrentamientos por interrumpirlo al trabajar y recordó una anécdota que vivió junto a Adela Noriega.
"Estábamos Adela Noriega y yo comiendo en un sótano todos amontonados, teníamos nada más media hora para comer porque se nos iba la luz y había que hacer la escena de la boda de 'Fuego en la sangre', había unas ventanas y los chavos abrieron las ventanas, rompieron los vidrios y se dejaron venir, entonces yo me paré les tiré agua y quité a Adela para protegerla y se armó, llegaron los de seguridad", recordó.
Pero también se dijo agradecido con el público porque " gracias a ellos nosotros los artistas comemos y subsistimos", recalcó.