En las escuelas de Turquía no se enseñará sobre la evolución
La evolución dejó de ser una teoría hace mucho tiempo y aunque hoy es aceptada como verdadera por la mayoría de las personas, aún hay cierta resistencia. En los últimos años, a través de su presidente Recep Tayyip Erdogan, en Turquía fueron estableciendo reformas para promulgar leyes que hicieran del país un estado religioso bajo los conceptos del Islam y, tristemente, la educación de niñas y niños de todo el país sufre ahora un durísimo revés...
La evolución deja de ser prioridad en Turquía
Se le sigue llamando « teoría de la evolución», pero se trata de un concepto que la ciencia probó como verdadero, pese a ello hay personas que bajo pretextos religiosos niegan su validez y presentan informaciones falsas a niñas y niños, alterando su educación.
Turquía, cuyo territorio está parte en Europa y parte en Asia, dejará de enseñar la teoría de la evolución a los estudiantes de primaria y secundaria, dentro de un nuevo programa educacional que pondrá mayor énfasis en materias religiosas escapando así de conceptos que su Presidente considera « demasiado occidentales.»
En Turquía el promedio de escolaridad llega a los 6,5 años y resultados de pruebas internacionales lo ubican en el lugar 49 de entre 72 países, una realidad que en vez de mejorar, irá empeorando.
Para el presidente Erdogan, la educación que reciben los estudiantes turcos no debe hacer énfasis en ciencias y, desde su llegada al gobierno, la calidad del programa educacional del país decayó fuertemente. No solo rendimiento, sino también en los contenidos, dando mayor importancia a todo lo relacionado con el Islam.
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Cada año, más de 90 mil jóvenes turcos dejan su país para obtener educación superior en otras naciones y gracias a un nuevo currículo (que omite cosas tan importantes como la evolución), los estudiantes estarán en seria desventaja frente a sus pares del resto del mundo.
El presidente Erdogan pretende evitar la «fuga de cerebros» a otras naciones mediante modificaciones al sistema educacional de su país, imponiendo el estudio de las leyes del Islam ya que en su opinión, no tiene sentido enseñar a los chicos ciencia o matemáticas si es que no conocen los conceptos religiosos primero.
El ministro de Educación de Turquía, Ismet Yilmaz, señaló que «la teoría de la evolución se debe enseñar en las universidades», ya que los niños y jóvenes en edad escolar no son capaces de comprenderla correctamente.
Ante el anuncio de los cambios en la educación que recibirán los estudiantes turcos, familias se plantean el enseñar a sus hijos en casa, enviarlos a escuelas fuera del país a una edad temprana o simplemente dejar Turquía.
A temprana edad es más sencillo que niños se enamoren de la ciencia y, conceptos como la teoría de la evolución son claves para que comprendan quiénes son, de dónde vienen y el mundo que les rodea, un privilegio que se les quita a los estudiantes turcos y que tendrá efectos nocivos en la sociedad a corto, mediano y largo plazo.
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