Manteniendo el legado de su madre al desafiar la idea de que las cantantes debían ser talla 4, Chiquis Rivera ha recorrido un camino interesante para abrazar su talla y hacer de ella una ventaja estilística. “Estoy enamorada de mi cuerpo y lamento que no haya más diseñadores haciendo piezas bellas para múltiples tallas”, nos confesó en esta entrevista unas horas antes de estar lista para la alfombra de los Premios Juventud 2016.