Pareja gay adopta a 6 hermanitos que no querían ser separados: historia conmueve a Internet
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A pesar de críticas o señalamientos, el amor por los hijos puede manifestarse de enormes maneras, como el de una mujer que adoptó a 5 niñas y decidió ser madre soltera, o el de 6 hermanos que no deseaban ser separados.
La historia de esta media docena de hermanos argentinos llegó a oídos de un matrimonio gay que llevaba más de 20 años juntos y querían convertirse en papás, por lo que no dudaron en buscar a los pequeños.
Así Víctor H. Sajoza y Jorge Antonio Elías decidieron darles un hogar a Laura (8 años), Martín (10 años), Agustín y Ariel (11 años y gemelos), Celeste (12 años) y Dante (13 años).
Al diario el 'Clarin’ de Argentina el 26 de diciembre de 2022, la pareja de hombres de 50 años comentó que tienen muchos sobrinos y ayudaron a criarlos, por lo que siempre supieron que querían ser padres.
Pareja gay adopta a 6 hermanitos que no querían ser separados
Su historia conmovió a todo internet ( como la de hombre que adoptó a un bebé que encontró en la basura) cuando se hizo viral por el mismo Víctor en Twitter el 18 de noviembre de 2022, pue en un hilo contó cómo fue todo el proceso.
En 2016 se inscribieron para ser familia de acogimiento en un programa que busca dar cuidado y contención a niños que, por distintos motivos, hayan sido separados de su hogar de origen.
Incluso llegaron a vivir un año y medio con una bebé de 10 días de nacida, la cual aún los tiene en gran concepto y hasta a los 6 hermanos les suele decir en broma que la pareja de padres es suya.
De acuerdo con los tuits del hoy papá de los seis hermanos, la adopción de los hermanos comenzó el 10 de septiembre de 2021, cuando se enteraron en un programa de noticias sobre unos niños en Salta que no querían ser separados.
Los hermanos vivían en una casa juntos y bajo el cuidado de personas encargadas de ellos y cuando Victor y Jorge empezaron el papeleo para adoptaros, ellos no sabían cómo eran.
El primer día que se conocieron fue “amor a primera vista” y la pareja de hombres se sorprendió de los modales de los niños y de que desde ese momento les preguntaron si les podían decir “papás”.
Con esa primera experiencia los niños y los padres quedaron enamorados y comenzaron a prepararse para cuando se hiciera oficial que tenían la custodia y podían llevarlos a su nuevo hogar.
En diciembre los niños se mudaron a Córdoba con sus nuevos papás, pero ese fue solo el inicio de las dificultades y los nervios, pues Víctor y Jorge eran inexpertos y querían asegurarse de que sus hijos fueran felices.
Pero poco a poco todo se fue acomodando, lo niños entraron a la escuela e hicieron nuevos amigos, todos juntos se unieron a los boyscouts, organizaron fiestas de cumpleaños y de fechas especiales.
El cambio en los niños era notable, cada vez más se sentían en libertad y cómodos en su nuevo hogar (el cual fue remodelado para que tuviera más cuartos) y con sus papás.
Así pasó un año y cuando tuvieron que ratificar su decisión ante una jueza, ya no había vuelta atrás, los niños estaban encantados y habían tenido un cambio para bien; mientras que los padres ya los consideraban familia.