Los incendios en California han desplazado a cientos de miles de personas y destruido miles de viviendas. Más de 40 personas han fallecido y 230 personas han sido reportadas como desaparecidas de acuerdo al Departamento Forestal y de Protección de Incendios de California (CalFire). Muchas de las víctimas han sido encontradas dentro de automóviles, cerca de ellos, o en medio de estructuras que resultaron completamente quemadas. Las ciudades de Glendale, Los Ángeles, Santa Ana, Anaheim y Long Beach, son las más expuestas por el fuego.