Viajamos al centro de Florida, donde la llegada masiva de puertorriqueños puede ayudar a inclinar la balanza electoral de este crucial estado. Las campañas de los candidatos -principalmente la de la demócrata Hillary Clinton- están a la caza del voto boricua, pero el gran reto será convencer a aquellos puertorriqueños que sienten desencanto y desinterés por las elecciones.