Si odias los LUNES tanto cuanto este gato, quizás sufres de deutorofobia
jw:o4E6bnLd
¿Quieres una descripción gráfica del sentimiento colectivo de un lunes por la mañana? Este gatito lo refleja muy bien. Es una mezcla de sueño, desolación porque el fin de semana acabó y cansancio (sí, ya cansancio) por lo que está por venir en la semana. Hay tanto involucrado que realmente es difícil de explicar.
Pero es inevitable: el lunes llega y con él, la rutina. El lunes significa que nuevamente perdiste tu libertad, que debes regresar a las cadenas de tu trabajo de oficina, que empieza una nueva semana escolar y que faltan ciinco días para volver a saborear la perfección del fin de semana; ese que usaste para devorar lo nuevo de Netflix acompañado de toda la comida chatarra que te pasó por el frente. ¡Benditos fines de semana!
Deutorofobia
La imagen del gatito es una simple broma, pero hay quienes ven a los lunes como algo mucho más grave: la deutorofobia. Tan solo pensar en el primer día de la semana, la persona experimenta alteración del sueño, problemas para levantarse de la cama, ansiedad, taquicardia, dolor estomacal y/o sudoración. Incluso, esta sensación puede generar padecimientos médicos mucho más preocupantes.
Según la consultora Bayton, el 72 % de las personas se siente desganada para iniciar la jornada laboral los lunes y, aunque no todas sufran de deutorofobia, es claro que tienen algo en común: ven el trabajo o la rutina semanal como una tortura.
La deutorofobia ocurre mayormente en personas desempleadas o descontentas con su empleo, los que están en un puesto laboral que les exige demasiado y genera mucho estrés y en quienes temen a perder su trabajo. Pero hay ayuda. Nunca está demás ir a terapia a conversar sobre sus problemas y el por qué sienten que el lunes es tan terrible.
La solución más obvia y próxima es cambiar de trabajo, por lo que quizás sería hora de empezar a mirar hacia otras oportunidades. Cuando uno se encuentra en lo que hace, trabajar deja de ser una pesadilla y los lunes son menos aterradores (ya que la pereza habitual probablemente nunca dejará de existir).
¿Piensas que sufres de deutorofobia? No dudes en buscar ayuda profesional. Te sorprendería saber cuánta gente parece sufrir por estar navegando en aguas que parecen no ser las suyas. Hablar siempre ayuda. ¡Libérate!
Lunes, un conflicto universal:
